La última de las partes de la rutina CIL es quizás la más compleja y la más crítica en cuanto a impacto en la OEE
La lubricación es básica para el correcto funcionamiento del equipo. Los defectos de lubricación pueden provocar graves averías, por eso si bien en el día a día cuesta ver sus beneficios, a largo plazo se reducirán las incidencias y la gravedad de las mismas, reduciendo el tiempo y materiales requeridos para la reparación.
GRANDES AVERÍAS
La rotura de una cadena se puede llegar a solucionar, según donde esté situada, rápidamente, pero la sustitución de un rodamiento puede suponer, en según que elementos, horas de arduo trabajo, por no hablar si la rotura de dicho rodamiento nos ha producido un desgaste en el eje del mismo, o incluso la rotura total.
Dos superficies moviéndose una contra la otra siempre tienen una fricción que produce calor, si dicha fricción no se reduce con la lubricación el calor puede aumentar hasta deformar o romper alguna de las dos superficies.
La lubricación se deja muchas veces para más tarde, no es visible ni controlable, «dejo de lubricar y a las 11 horas y 58 minutos la máquina se romperá», el «ya lo haré» siempre acaba provocando averías por eso es importante ser rígido en el aspecto de la lubricación y seguir las rutinas adecuadamente. Todos los que nos dedicamos a esto sabemos de su importancia pero si no se controla adecuadamente es un aspecto que se acaba sacrificando.
¿MANTENIMIENTO O PRODUCCIÓN?
Una de las dudas que siempre me surgen en el tema de la lubricación y el Mantenimiento Autónomo es: ¿Qué deben lubricar los operadores y qué los técnicos? En un inicio es evidente que el engrase en formato aerosol con lubricante es algo que puede hacer el operador menos experimentado, el siguiente paso entraría la lubricación con grasa usando engrasadores, aquí el operador ya tiene que tener más «cariño» en lo que hace intentando evitar la entrada de suciedad dentro del elemento a engrasar, no poner demasiado o poco lubricante, etc. En un último paso entrarían los cambios de líquidos lubricantes o el desmontaje de elementos complejos, este último aspecto en mi opinión excede el propósito de lo que debería ser el Mantenimiento Autónomo por ello debería ser realizado por los técnicos de mantenimiento.
Para acabar esta serie dedicada a las rutinas CIL en la última entrada pondré un ejemplo de rutina CIL con su checklist.
Hola,
Yo se que la entrada tiene mucho tiempo de haber sido escrita, ni siquiera se si aun te dedicas a esto. Publicaras la última entrada? (ejemplo de rutina CIL con su checklist)